¡Felicitaciones por tu nueva joya BEE QUEEN!
Creemos que las joyas deben usarse todos los días. La mayoría de las joyas que vendemos requieren muy poco cuidado… ¡úsalas y disfrútalas!
Te recomendamos quitarte las joyas al nadar, hacer jardinería, hacer deportes de contacto y mover objetos pesados. Dicho esto, depende de tu estilo de vida, tus preferencias y la frecuencia con la que pierde cosas… ¡quitarse las joyas con regularidad parece ser el mayor culpable de las pérdidas!
Con eso en mente, aquí hay algunos consejos útiles para que tus joyas se vean lo mejor posible.
ORO, PIEDRAS PRECIOSAS Y SEMI PRECIOSAS
Mezcla una pequeña cantidad de detergente para loza con agua tibia en un recipiente, coloca dentro las joyas y déjalas reposar durante unos minutos. Luego, usa un cepillo de dientes de cerdas suaves y frotalas con delicadeza. Finalmente, retira las piezas del agua con jabón, enjuágalas y sécalas bien con un paño suave… ¡y verás como recuperan su brillo original!
Adicional a lo anterior, recomendamos lleves tus anillos de diamantes a un joyero de tu confianza al menos una vez al año para hacerles mantención.
PERLAS
¡A las perlas les encanta ser usadas! No les gusta que las guarden y su brillo solo mejorará a partir de los aceites naturales de la piel.
Sin embargo, necesitan un cuidado adecuado para que duren muchas vidas. Las perlas son más vulnerables a los productos químicos que se encuentran en los cosméticos y perfumes. Y a las perlas NO les gusta el cloro, ni en piscinas ni en duchas regulares.
¡Las perlas siempre se ponen al final de tu rutina por lo que, arréglate siempre antes de ponerte tus perlas!
Las perlas SÓLO se deben limpiar con un paño suave humedecido con agua y un poco de jabón neutro.